Dedicatoria

Quisiera regalarte un libro
y escribir una dedicatoria,
pero no sé qué decir, ni como,
ni cuánto, ni por dónde empezar...

Deseo que por siempre jamás, siempre,
te resida un dragón indomable en el corazón capaz de sangrar

por las heridas abiertas destilando fluidos

de dónde crezcan flores encendidas.

Querría regalarte un libro
con las páginas bien llenas
de pétalos, perfumes y prendas
que hicieran olvidar las penas.

Espero que te habite el cuerpo un caballero viajero,
de aquellos que todavía buscan tesoros y quimeras,
de aquellos que distinguen sonidos, silencios y voces,
que se enfrentan al miedo, los monstruos y las fieras.

Y escribir una dedicatoria
de anhelos, pensamientos, deseos,
esperanzas, voluntades, estandartes
y peregrinajes hacia la victoria.

Anhelo tenerte como morada
y abrazarte entre mis brazos las noches en vela,
ofrecerte sonrisas de nieve, de fuego, terciopelo y seda
mientras te enfrentas a nuevos peligros sin centinelas.

Querría regalarte un libro
con las páginas en blanco
por llenarlas de leyendas
que inventaríamos juntos.